En algún momento del año tenemos que hacer limpieza en
nuestro armario. Muchos lo hacen de un año para otro, otras personas lo hacen
con el cambio de temporada. Si no se realiza esta limpieza, la ropa y los
zapatos se acumulan y ocupan más espacio del que tenemos. En nuestra mente para
igual, los bañadores, pantalones y camisetas son nuestros pensamientos y
recuerdos que vamos amontonando.
¡Vamos a enseñaros a hacer una limpieza de vuestros armarios
mentales! Primero hay que decidir nuestras prendas claves, nuestros MUST y de
lo que vamos a deshacernos, es decir, lo OUT.
Vamos a buscar en los cajones de nuestra mente todos los
traumas, los prejuicios, los estereotipos y los sentimientos o emociones
negativas que hemos ido acumulando. No podemos hacer nada para cambiarlas, por
lo que estas experiencias del pasado las arrojamos a la basura, eliminándolos
para siempre de nuestra vida.
A todos nos cuesta deshacernos de nuestra ropa, incluso
pensamos que tener más significa que tenemos muchos más outfits que ponernos,
pero ¿llevamos todo lo que hay en nuestro armario? ¿No nos preocupamos más por
el qué me pongo? ¿No serias feliz sin tanta cantidad de prendas? ¿No nos
facilitaría el día a día?
Definitivamente hay que hacer limpieza de lo negativo, de
los pensamientos fuera de moda, de las emociones similares, sentimientos viejos
y estereotipos rotos. ¿Por qué guardar todo esto cuando el espacio que ocupa
puede ser usado por algo positivo? Deshazte de lo que te amarga y te impide
avanzar.
Estas vacaciones de Semana Santa es el momento ideal para
hacer limpieza en nuestro armario mental. No te apegues a las cosas, pon todo en perspectiva y piensa
bien que cosas pueden servirte y las que no puedes utilizar más.
No hay nada más bonito y satisfactorio que un armario
ordenado… ¡Imagina lo bien que te sentirás después de limpiar tus cajones
mentales!
