“Estudiante se suicidó por sufrir bullying”
“Feroz golpiza deja a escolar inconsciente”
¿Es duro leer esto verdad? ¿Y si nos pusiésemos por un
momento en la piel de la persona que llega a su casa con moratones y heridas, o
lo que es peor, con la certeza de que no es lo suficiente bueno como para
merecer vivir?
Cuando empiezas el colegio se supone que todos hacemos
amigos, pero ¿que pasa si aún cuando casi no levantas dos palmos del suelo ya
sientes que ese no es tu sitio? Pasa que intentas no llamar la atención porque
sabes que a la mínima que te vean, irán a por ti porque eres el blanco fácil,
la persona a la que todos recurren para desfogarse de sus frustraciones. Te
pasas toda una infancia llorando cada vez que llega la hora de dormir porque
sabes que al día siguiente tendrás que volver a construir ese muro que una vez
más destruirán con insulto como “gafotas”, “ballena” o “enano”.
En ese tiempo, me hubiera gustado saber que pensaba esa
gente que estando sola me saludaba y estando con gente me maltrataba. Ahora que
ha pasado el tiempo lo que me pregunto es ¿Por qué me dejé? ¿por miedo? Si
lucháis, ese miedo desaparecerá, y comenzareis a vivir plenamente, que bajo mi
punto de vista es una inmensa bendición.
No soy de esas personas que le guste dar consejos, pero
si soy de esa chica de gafas y aparato, o esa chico bajito, o esa chica gorda.
Así que, no por favor, ni por vuestra familia, no; por vosotros. LUCHAR,
siempre luchar.
Alumna de 1º de Integración Social